sábado, 7 de mayo de 2022

(2) UN VERANO CON MÓNICA (1953), de Ingmar Bergman

El desencanto libérrimo
La juventud —más si está apresada en un contexto oprimido, misógino y con explotación laboral como el de los protagonistas— siempre se ha caracterizado por una búsqueda incesante por alcanzar la libertad. Una especie de deseo de un mundo propio, creado a su medida, sin obligaciones, sin convenciones sociales y sin jerarquías. 
Harry y Monika inician un proceso de liberación que les llevará a escapar y a experimentar insólitas y diferentes sendas. En esa exploración asimilarán nuevos conceptos y dificultades humanas que les conducirán a recovecos y obstáculos difíciles de solventar. Es ahí cuando vislumbrarán que “la rueda de la vida” les está persiguiendo para atraparles en su red, esto es; casarse, trabajar, cuidar de los hijos…, algo así como una vuelta a los orígenes, a los principios sociales que ellos detestaban e huían
Bergman plasma muy acertadamente todas estas motivaciones, ilusiones y fracasos con una fantástica realización aderezada de bellas imágenes, puesta en escena y fotografía. Hay momentos magistrales como el primer plano de Harriet Andersson fumando, mirando a cámara y expresando en su mirada todo aquello que esconde en su relación con su pareja. Sin embargo, también existen algunas escenas chirriantes como la de la pelea entre los dos chicos y el robo de la comida. 
Un verano con Mónika, es una obra menor, pero con apuntes interesantes.

SOMMAREN MED MONIKA. 1953. Suecia. Blanco y Negro. 93 Min.
Dirección: Ingmar Bergman
Intérpretes: Harriet Andersson, Lars Ekborg, John Harryson, Georg Skarstedt, Dagmar Ebbesen, Bengt Eklund, Ake Fridell
Guion:  Ingmar Bergman, Per-Anders Fogelström. Novela: Per-Anders Fogelström
Música: Erik Nordgren
Fotografía: Gunnar Fischer

lunes, 2 de mayo de 2022

(3) DESIERTO (2015), de Jonás Cuarón

De la esperanza a la desesperación
La lucha por la supervivencia por encontrar un futuro alejado del sufrimiento ha sido —amén de ser un tema candente en la actualidad— una constante a lo largo de la historia. La intolerancia y la actitud beligerante —ambas, hijas de la ignorancia— ejercida por aquellas mentes maliciosas, carentes de empatía e insolidarias, dan como fruto un mundo absolutamente desigual. 
Desierto refleja esa realidad contextualizada en la frontera entre México y los Estados Unidos a través de las figuras de los migrantes mexicanos. Aparte de ser una película con un cariz reflexivo y didáctico tiene el mérito de armonizarlo con el género de suspense mediante la persecución que realiza el vigilante armado (clara alusión a la psicopatología fascista que acecha en tiempo presente). Lo que en un principio era una salida hacia la esperanza se transforma en un camino sin retorno. 
Jonás Cuarón se erige en este interesantísimo film como una figura a seguir en el futuro. Estuvo nominada al Oscar a la mejor película extranjera de habla no inglesa.

DESIERTO. 2015. México. Color. 94 Min.
Dirección: Jonás Cuarón
Intérpretes: Gael García Bernal, Jeffrey Dean Morgan, Alondra Hidalgo, Diego Cataño, Marco Pérez, Lew Temple
Guion:  Jonás Cuarón, Mateo García
Música: Woodkid
Fotografía: Damián García