viernes, 23 de julio de 2021

(2) EL RÍO Y LA MUERTE, de Luis Buñuel (1955)

Ignorancia, ergo, violencia
En esta adaptación de la novela “Muro blanco en roca negra” de Miguel Alvarez Acosta, Buñuel muestra el antagonismo entre lo racional y lo irracional, entre lo cabal y lo vil, entre la paz y el desorden. Así, de esta sutil manera, denuncia la violencia gratuita incrustada en la idiosincrasia de la sociedad mexicana. La vida —en estos entornos, sin ningún valor— y la muerte —consuetudinaria, junto a otras leyes no escritas de la aldea— se cogen de la mano para ofrecer un contexto donde la ignorancia y la falta de educación cultural conducen irremediablemente a la agresión constante y al ensañamiento. Todos estos conceptos son plasmados en una atmósfera cruda y asfixiante produciendo una enorme desazón en el espectador. 
El papel del joven médico es crucial, una bocanada de aire fresco en un ambiente tóxico, infectado por el odio. Su rol, fundamental, supone un mensaje de esperanza en un mundo podrido por la competencia y la animosidad. 
Correcto film del director aragonés, aunque con algunas lagunas, especialmente en las peleas y en su edulcorado final.

EL RÍO Y LA MUERTE. 1955. México. Blanco y Negro. 91 Min.
Dirección: Luis Buñuel
Intérpretes: Columba Domínguez, Miguel Torruco, Joaquín Cordero, Víctor Alcocer, Jaime Fernández
Guión:  Luis Buñuel, Luis Alcoriza (Novela: Miguel Álvarez Acosta)
Música: Raul Lavista
Fotografía: Raúl Martínez Solares
 
Críticas de Luis Buñuel (clicar en este mismo enlace para leer las críticas):  
Los Olvidados (1950), Las Aventuras de Robinson Crusoe (1954), La Via Láctea (1969), Tristana (1970), El Fantasma de la Libertad (1974)

No hay comentarios: