Un film que te parte en dos
Una historia absolutamente apabullante como esta tiene muchos elementos que, en un principio, facilitarían la realización de cualquier expresión artística. No obstante, esto es muy fácil de decir y muy complicado de ejecutar. Porque para transmitir emociones negativas como la angustia, el remordimiento y la indefensión se requiere una capacidad empática que profundice psicológicamente en todos los recovecos de las almas que las padecen.
La impresión que tengo al ver esta película es que el director Marcus Von Horn lo logra tanto en forma como en contenido. La parte técnica, compuesta por fotografía (su blanco y negro es decisivo en este aspecto), puesta en escena, planificación y elección de los escenarios, refuerza la desconcertante oscuridad que recorre cada fotograma. El guion, basado en hechos reales, es tan escalofriante que el relato, in crescendo, hace que nunca puedas imaginar hasta dónde puede llegar la crueldad y la inhumanidad
Nos situamos en Copenhague tras la Primera Guerra Mundial. Tiempo de miseria y sufrimiento. No es fácil ganarse la vida ni tener bienestar social. Karoline busca abrirse un hueco en medio de tanta penumbra. La ausencia de su marido desaparecido, el enamoramiento con el empresario, el posterior embarazo y el encuentro con Dagmar —que ayuda a madres desfavorecidas a colocar a sus recién nacidos en hogares de acogida— cambiarán su vida.
Entre el drama y el gótico perturbador, esta pesadilla nos parte en dos como espectadores, dejando una sensación amarga y gris que persiste mucho después de los créditos, dándote cuenta de que acabas de visionar una gran película.
PIGEN MED NÅLEN. 2024. Dinamarca. Blanco y Negro. 113 Min.
Dirección: Magnus von Horn
Intérpretes: Vic Carmen Sonne, Trine Dyrholm, Besir Zeciri, Ava Knox Martin, Joachim Fjelstrup, Tessa Hoder, Søren Sætter-Lassen
Guion: Line Langebek Knudsen, Magnus von Horn
Música: Frederikke Hoffmeier
Fotografía: Michal Dymek
No hay comentarios:
Publicar un comentario